Curiosidades internas

Anna y punto

bloguera

 

Es curioso que aunque todos nacemos de la misma manera y del mismo sitio, a cada uno el tiempo nos tiene preparado un destino diferente.

Lo sorprendente de la vida es que igual que viene, se va. No nos damos cuenta de su existencia hasta el mismo día que nace una o se va otra. Pero, ¿y mientras tanto?

Porque la vida sigue fluyendo igual.

Nuestro cuerpo sigue moviéndose al son de los latidos de nuestro corazón mientras llega el momento de dejar de respirar. Seguimos sin más, sintiendo y haciendo: comemos, dormimos, lloramos y reímos porque es lo que nos sale como natural hasta que alguien se va, muere y es entonces cuando nos damos cuenta de lo corta que es la vida y nos prometemos a nosotros mismos como si fuese un juramento forjado con fuego que las cosas van a cambiar. Pero a la mañana siguiente seguimos con el mismo café de todos los días.

Se me hace desalentador pensar que todos pensamos y hacemos igual, cuando nos creemos tan diferentes y la única diferencia palpable entre unos y otros que me he encontrado hasta el día de hoy, es que unos nacen entre algodones y otros entre cartones.

Pero la realidad de cada uno está más adentro de una simple conjetura. Qué fácil es echar la culpa a todo lo demás cuando la vida en todas sus descripciones está acumulada en todos los rincones de nuestras venas y en todo lo que nos rodea.

Mañana por la mañana, tomaré un capuchino con tostadas. Que le den al régimen.

Pequeñas señales que lanza desde su faro
"A veces la lucha no sirve de nada, excepto para crear heridas sobre heridas que nunca curarán."
"Nunca me ha gustado escribir tan directamente sobre mí. Me desnudo sin complejos y eso implica que me puedan dar un buen tomatazo subida en el escenario ante la mirada crítica de todo el mundo, pero creo que lo bueno de la vergüenza es que es como el viento, igual que aparece sin permiso, se despide sin decir adiós."
"En mi pequeño espacio Zen, aparte de poner mucho incienso para ocultar los malos olores que llegan desde fuera, he implantado algo de Feng Shui adornando mi alma, mente y corazón con un gran espejo enfrentado a la ventana, para que el sol me alumbre el doble. He puesto la cama frente a la puerta para verlas venir y me he deshecho de todo aquello que lo único que hacía era recargar y quitarme espacio vital."
"Gracias a todos los que os habéis preocupado por mí y me habéis hecho llegar palabras que siempre llenan. Muchos besos."

Verde esperanza
Nemat Safavi
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Chupitos