Alfonso de Aragón, dueño de Nápoles

Crítica era la situación de Alfonso de Aragón; reducido estaba a dos castillos de Nápoles sin bastimentos el que pocos días antes disponía de todo el reino siciliano. Por fortuna suya arribó oportunísima y felizmente al puerto de Nápoles una flota catalana de treinta fustas, que era la que se decía iba a buscar la reina Juana para traerla a Cataluña. 

Con tan poderoso refuerzo cambió tanto la situación de las cosas, que determinó el rey don Alfonso combatir la ciudad desde los castillos, desde las galeras, por tierra y por mar, y entrarla por todas partes a sangre y fuego. Así se hizo. Se combatió furiosa y sangrientamente en las calles de Nápoles: los barrios de que se iban apoderando los españoles eran saqueados e incendiados. Sforza peleaba heroicamente y se batió por largo espacio a pie después de haberle matado cuatro caballos. La ciudad ardía por diversos puntos: arrollados los angevinos después de una lucha horrible de dos días, se retiraron no sin que Sforza lograse sacar a la reina del castillo de Capuana y ponerla a salvo llevándola a Nola, obrando en todo momento con un valor y una celeridad increíbles. Quedó otra vez Alfonso de Aragón dueño de Nápoles (junio de 1423).

La versátil reina Juana revocó entonces por público instrumento la adopción de Alfonso con todos los derechos que le había otorgado, llamándole infiel, ingratísimo y cruelísimo, y transfirió la adopción al que había sido siempre su competidor y enemigo, Luis de Anjou. Reunidas con esto las fuerzas de Luis y de Sforza, y haciendo alianza con el duque de Milán y señor de Génova, determinaron tomar la ofensiva. Conociendo Alfonso la dificultad de resistir al poder de los confederados, aunque entretando había tomado por combate la fuerte ciudad y castillo de Ischia, resolvió reembarcarse para sus reinos de España, dejando la defensa de Nápoles y la lugartenencia de aquel reino al infante don Pedro, su hermano. (1)

Salió, pues, de Nápoles el rey don Alfonso y a mediados de octubre (1423) se dio a la vela en Gaeta con dieciocho galeras y doce naves. Poco antes de regresar a Cataluña quiso acometer una gran empresa, que en parte le indemnizara de sus contratiempos de Nápole. La rica, fuerte y populosa ciudad de Marsella pertenecía a su enemigo Luis de Anjou, y Alfonso se propuso o conquistarla o destruírla.

______________

(1) Esto explica la ausencia de Castilla de este infante en medio de las revueltas que sus hermanos estaban provocando por este tiempo.






La Historia General de España de Modesto Lafuente, es considerada el paradigma de la historiografía nacional del pensamiento liberal del siglo XIX. 
Impresa en Barcelona por Montaner y Simón entre 1888 y 1890.


SOBRE ESTA BITÁCORA

Author image

Esta bitácora nace en noviembre de 2008 con el ánimo de divulgar historias curiosas y entretenidas. Son 17 años acudiendo diariamente a la llamada de amigos que vienen de todo el mundo. Con +6.523.000 de visitas, un mapa del románico abierto a finales de 2023 que ya ha recibido +734.000 consultas y +6000 artículos en nuestra hemeroteca, iniciamos una nueva andadura. Comparta, Comente, síganos por nuestros canales de Telegram y Wasap. Y disfrute. ¡Es gratis!

0 comentarios en el blog:

EN PORTADA | MUNDO CURIOSO | MACROSURCO DEL MAESTRO GUZMÁN RICIS | FELIPE CALVO ☻ +1.873👀

Acarrea, majito

Va a ser difícil para los jóvenes de la era nucleo-electrónico-espacial imaginarse un carro mordiendo caminos, gastando llantas haciend...